"CRÓNICA" DE UNA MALDAD
Jhonny Villarruel
No es fácil escribir desde la bronca.
Mucho menos aún desde la injusticia.
Y cuando se juntan ambas. El coctel es explosivo.
En la mañana de hoy cuando los mensajes arreciaban para que mirara lo que aparecía en la pantalla de Crónica TV, una marea de bronca y rabia inundaba la mente.
Los que estamos en esto de la comunicación social y, más aún, si llevamos algunos años, sabemos perfectamente quién es quién en el ambiente.
Sabemos qué se puede esperar de este medio y hasta dónde puede llegar aquel otro.
Pero lo de hoy de Crónica, nos llevo hasta el límite mismo de exasperación.
La verdad que ver en “pantalla roja” la expresión “abuso de menores” y que se acuse a dos instituciones, que si algo han hecho en su historia fue ganar prestigio y respeto, como Martín Fierro y Atlético de Maciá, te rebela inmediatamente ante tamaña injusticia.
Porque en el periodismo el “ABC” es siempre preguntar primero ¿qué paso?
El primer día, del primer año de periodismo, lo primero que aprendes, es a tener las pruebas suficientes que avalen la noticia que vas a dar.
Hoy Crónica TV, fiel a su estilo, hizo primar la “placa roja” por encima de la verdad. Hoy la verdad quedó de lado detrás de la necesidad de una placa rimbombante. Hoy se mintió.
Hasta aquí, nada extraordinario.
El tema es que gratuita e irresponsablemente se ensució a dos prestigiosas y jerarquizadas instituciones de nuestra Unión Deportiva.
Muchos padres se sintieron conmovidos y movilizados cuando una foto en la que aparecía su hijo tenía al pie de pantalla la expresión “abuso de menores”
Una ciudad entera se conmocionó ante semejante revelación de un canal que supuestamente está “firme junto al pueblo”.
Y hubo dudas, llamadas, preguntas, desconfianza y tanto más.
¡Cuánto mal se puede hacer cuando se ejerce el periodismo desde el mercenarismo de una “placa roja” sin medir los alcances que esto conlleva!
El caso es que el rating creció, la “placa roja” vendió y la verdad quedó ultrajada en la banquina.
¿Y ahora?
Ahora hay que activar los mecanismos de defensa.
Que nadie dude que Martín Fierro y Atlético de Maciá siguen siendo tan prestigiosos como siempre.
Pero han mancilladlo su buen nombre y honor y eso no hay que permitírselo a nadie.
En un mundo donde parece que solo triunfa la podredumbre y la corrupción, los honestos tenemos que pelear por nuestro lugar.
Es hora que la Unión Deportiva actúe en defensa de sus instituciones, con la Federación Entrerriana de Fútbol, para darles acompañamiento y contención a los clubes de Maciá.
Es momento que los funcionarios políticos que saben perfectamente el valor de los clubes en cuanto a contener y formar pibes, salgan a la palestra a defender al “fierro” y al “rojo”.
Es hora de demandar a quién sea para que el buen nombre de nuestras instituciones quede a salvo.
Pero fundamentalmente es tiempo que los representantes políticos pidan audiencia con las máximas jerarquías de la comunicación en el país, para exigirles una reparación y resarcimiento por el daño causado a dos instituciones del interior del país. Que el país sepa que defendemos lo que somos con la verdad y contra cualquier “placa roja”.
Que de una vez por todas, los inescrupulosos de la comunicación, sepan que no pueden avasallar gratuitamente. No todos somos borregos.
Mis respetos y admiración a Martín Fierro y Atlético de Maciá y solo puedo dejarles mi amargo sabor por la injusticia y esto que alguna vez un Hermano Marista nos hizo estudiar por si lo necesitáramos en la vida.
Puede una gota de lodo
sobre un diamante caer.
Puede también de este modo
su fulgor oscurecer.
Pero aunque el diamante todo
se encuentre de fango lleno,
el valor que lo hace bueno
no perderá ni un instante:
y será siempre diamante
aunque lo tape el cieno.